martes, 14 de febrero de 2012

Llorando partiendo cebollas

Las cebollas tienen bastante azufre (S), en concreto trióxido de azufre (SO3) o como yo lo estudié: Anhidrido Sulfúrico. Cuando cortas una cebolla, se rompen unas pequeñas vesículas que liberan el SO3 al aire. Este gas viaja hasta tus ojos y choca contra él. La superficie del ojo siempre está húmeda, de ahí el parpadeo constante, pues bien, cuando el SO3 entra en contacto con el agua H20 se produce la siguiente reacción: SO3 + H20 = H2SO4, o lo que es lo mismo, ácido sulfúrico. Por eso lloramos, tratamos de decrementar la concentración de ácido en nuestros ojos añadiendo más agua (lloramos).
El remedio más efectivo es meter las cebollas en la nevera 10, 15 minutos antes, esto hace que el el volumen de SO3 liberado sea menor (menos volatilidad del gas (supongo). La idea es sufrir un poquito, que no pasa nada y eso significa que uno esta donde quiere haciendo lo que le gusta. Como curiosidad, los yanquis han probado de todo para evitarlo (de ahí al foto)

3 comentarios:

  1. ji,ji,...

    lo voy a probar durante una semana a ver si es verdad y lo comento.

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  2. Venden unas gafas como las de bucear, que puedes estar monísimo de la muerte. En Club de Cocina. ;-)

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  3. Venden unas gafas como las de bucear, que puedes estar monísimo de la muerte. En Club de Cocina. ;-)

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